
Sinónimo de belleza y buen gusto
A principios de la década de 1950 una pequeña empresa de joyería de Brasil intentaba hacerse hueco en los círculos internacionales. Con hermosas joyas y una estrategia de marketing audaz para la época, la empresa estaba a punto de revolucionar la industria de la joyería tradicional. Detrás de la marca se encontraba Hans Stern, un alemán que varios años antes, en 1945, con 22 años, había fundado un pequeño negocio de comercio de piedras preciosas en Río de Janeiro.
A lo largo de más de 50 años, H. Stern ha consolidado su imagen de prestigio en Brasil y en el extranjero. En la actualidad la marca ya no requiere presentaciones formales. H. Stern se ha convertido en sinónimo de belleza y buen gusto, y distribuye sus creaciones a cualquier parte del mundo.